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COP21 se inició en París con el objetivo de dar más oxígeno al planeta

Quito (Pichincha).- El Presidente de la República, Rafael Correa, representa al Ecuador y a los países latinoamericanos y caribeños en la Convención Mundial Sobre el Cambio Climático (COP21)

Este encuentro pretende determinar, de manera decidida, qué camino vamos a seguir para proteger nuestro plantea. Para es en París se reúnen casi 150 jefes de Estado y de Gobierno, en lo que será una de las mayores conferencias diplomáticas que se han organizado, más allá de las sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York.

Durante las próximas dos semanas, en la COP21, se negociará la decisión más importante en la gobernanza del cambio climático de los últimos 23 años.

La prensa internacional sostiene que París cuenta con un gran impulso y, al contrario que en la conferencia de Copenhague del 2009, las perspectivas son radicalmente distintas. Pero aún quedan decisiones críticas por tomar, entre ellas, la financiación de la lucha contra el cambio climático, el aumento de las metas cuanto a la reducción de emisiones, el objetivo a largo plazo, y la forma legal del texto acordado.

Ecuador ya reveló cuál sería su posición. Es necesario que el mundo empiece a manejar un concepto de Justicia Ambiental, desde el cual los países ricos y más contaminantes deban retribuir económico los esfuerzos por la conservación del planeta que hacen las naciones menos ricas y coincidencialmente dueñas de grandes recursos naturales. Asimismo, crear una Corte de Justicia Ambiental de corte mundial para sancionar a los grandes contaminadores.

El cambio climático es un problema clásico de bienes públicos globales. Esto implica que los países buscan aprovecharse gratuitamente de los esfuerzos que hagan otros para proveer el bien. Dicho de otra manera, las naciones que no emprenden ninguna acción contra el cambio climático disfrutan de los beneficios logrados por quienes sí han actuado

Esa lógica debe cambiar. Los ciudadanos son cada vez más conscientes de las consecuencias de la quema de combustibles fósiles, están movilizándose y piden acción a sus gobernantes.

Durante los meses previos a la COP21 de París, 176 países han presentado sus planes (sus contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional, o INDC por sus siglas en inglés), describiendo las medidas contra el cambio climático que pretenden aplicar a partir del 2020.

El desafío es París es conseguir un camino entre los planes nacionales y las metas globales que nos lleven en la dirección correcta. Las decisiones que se alcancen serán fundamentales para dar más oxígeno para que respire el planeta. CIT / El Ciudadano


 

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